Desde hace unos meses está tomando fuerza el movimiento Brain Food, una corriente gastronómica que procura una alimentación saludable enfocada a mejorar el rendimiento del cerebro.
Este movimiento se basa en seis principios: mucho pescado, cereales integrales, fruta y vegetales, productos frescos, ingredientes puros o con un mínimo procesamiento industrial, menos carne y máximos de 10% de grasa; edulcorantes naturales y nunca más del 10% de azúcares añadidos y, finalmente, gustos, texturas y olores que satisfagan los sentidos. brainpower
Comer bien es bueno para la salud mental y física. El cerebro necesita nutrientes al igual que el corazón, los pulmones o los músculos. Pero, ¿qué alimentos son especialmente importantes para mantener nuestra materia gris feliz?
1. Opta por cereales integrales
El cerebro, al igual que resto del cuerpo, no puede trabajar sin energía. La capacidad de concentración viene de un adecuado y estable suplemento de energía, en forma de glucosa en la sangre que va al cerebro. Para ello, debemos elegir alimentos con bajo índice glucémico que liberan la glucosa lentamente en el torrente sanguíneo y mantienen tu mente alerta a lo largo del día. Elige cereales integrales, salvado de trigo, pan integral con semillas y pasta integral.
2. Come pescado azul
Los Ácidos Grasos Esenciales son aquellos ácidos grasos necesarios para ciertas funciones que el organismo no puede sintetizar, por lo que deben obtenerse por medio de la dieta. Las grasas más eficaces Omega-3 se encuentran naturalmente en los pescados azules como el salmón, la trucha, la caballa, el arenque o las sardinas. También son una buena de estos ácidos grasos, el aceite de linaza, el aceite de soja, las pipas de calabaza, el aceite de nueces y los brotes de soja. Buenos para una función saludable del cerebro, el corazón, las articulaciones y el bienestar general. Los bajos niveles se relacionan con un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad del Alzheimer y la pérdida de memoria.
3. Arándanos
El consumo de arándanos es eficaz para mejorar o retrasar la pérdida de memoria a corto plazo.
4. Come más tomates
El licopeno ES un potente antioxidante que se encuentra en los tomates, podría ayudar a proteger contra el tipo de daño de los radicales libres a las células que se produce en el desarrollo de demencia, especialmente la enfermedad de Alzheimer.
5. Añade vitalidad con vitaminas
Principalmente, vitaminas B6, B12 y ácido fólico, que reducen los niveles de homocisteína en la sangre. La homocisteína es un aminoácido producido en el cuerpo humano y que se encuentra de forma natural en la sangre y tejidos del ser humano. Normalmente, se transforma en otros aminoácidos para que los utilice el cuerpo. Cuando la homocisteína se presenta en niveles altos, según estudios, es un indicador de que existen riesgos de accidentes cardiovasculares, iptus, deterioro cognitivo y Alzheimer.
6. Aumenta el consumo de grosellas
Ricas en vitamina C que tiene la facultad de aumentar la agilidad mental. Las grosellas son una gran fuente de esta vitamina
7. Coge un “puñado” de pipas de calaba
Un puñado de semillas de calabaza al día es todo lo que necesita para obtener la cantidad diaria recomendada de zinc, esencial para la mejora de la memoria y las habilidades de pensamiento.
8. Apuesta por el brócoli
Es una gran fuente de vitamina K, que ayuda a realzar la función cognitiva y mejorar la capacidad cerebral.
9. Unas gotitas de salvia
La salvia ha tenido durante mucho tiempo la reputación de mejorar la memoria, aunque la mayoría de los estudios se centran en la salvia como un aceite esencial, podría valer la pena añadir salvia fresca a su dieta.
10. A por los frutos secos
Un estudio publicado en el American Journal of Epidemiology, sugiere que una buena ingesta de vitamina E podría ayudar a prevenir el deterioro cognitivo, especialmente en los ancianos. Los frutos secos son una gran fuente de vitamina E, junto con las verduras de hoja verde, espárragos, aceitunas, semillas, huevos, arroz integral y cereales integrales.
FUENTE: BBC Good Food